Las enfermedades de transmisión sexual (ETS) son infecciones que se transmiten de una persona a otra a través del contacto sexual. Los microorganismos que las producen se transmiten a través de los fluidos corporales (sangre, semen, saliva y fluidos vaginales).
Esto quiere decir que si mantenemos un contacto sexual sin penetración también nos podemos infectar. De hecho, hoy en día la principal vía de trasmisión de muchas ETS es el contacto oral con los genitales (pene o vajina).
Síntomas: Es importante tener en cuenta que no siempre presentan síntomas y, por tanto, pueden pasar desapercibidas hasta que se diagnostica a una pareja o aparecen complicaciones. Los signos y síntomas más frecuentes son: