Tras el embarazo y el parto, las músculos del suelo pélvico pueden debilitarse. Es de vital importancia para la nueva mamá centrar la atención en su cuerpo y en la recuperación física del mismo.

La postura, la pared abdominal y el suelo pélvico han sufrido modificaciones para irse adaptando al crecimiento fetal. El tipo de parto, vaginal o cesárea, influye directamente en este proceso.

Nunca debería haber dolor en las relaciones sexuales. Es frecuente que tras el parto muchas mujeres sufran molestias o incluso dolor en las relaciones sexuales. Esta situación es aún más frecuente si se ha realizado un corte en la vagina (episiotomía) o una cesárea. 

Esto ocurre debido a la fibrosis y la retracción generada por las cicatrices,  especialmente en el momento del coito.

Gracias a nuestras técnicas indoloras notarás alivio en los síntomas desde la primera sesión.

En ocasiones, es necesario durante el parto hacer un corte en la vagina para facilitar la salida del bebé. Esta incisión puede ocasionar molestias y dolor en el postparto. Las consecuencias que puede generar la cicatriz de la episiotomía varía en cada mujer. En algunos casos, perciben las molestias durante las relaciones sexuales, en otros al sentarse y cambiar de postura,  y desafortunadamente, en algunas mujeres la sensación de dolor es continua.

Gracias a nuestros profesionales expertos en fisioterapia del suelo pélvico y los tratamientos  específicos, podemos devolver la normalidad y laxitud a los tejidos para que desaparezca el dolor, se normalice la sensibilidad y las sensaciones de la mujer para hacer desaparecer todo tipo de molestias y la mujer pueda recuperar su vida habitual  y sexual.

Es la lesión que sufre el tejido perineal tras el parto. Se han establecido varios grados, siendo el tercer y cuarto grado los que implican el esfínter anal, y con ello el compromiso de continencia.

A este tipo de trauma se le suelen asociar patologías dolorosas y la incontinencia urinaria (tanto por esfuerzos como por urgencia)

Cuando una persona sufre una pérdida de orina, por pequeña que sea, haciendo un esfuerzo como  toser, reír o estornudar se considera incontinencia de esfuerzo. También existe la sensación repentina y súbita, desagradable de ir  al baño a orinar de urgencia que se considera urgencia miccional.

Desde el Gabinete de Urología y Andrología queremos hacer hincapié en que:

ESTO NO ES NORMAL.

Como muchas mujeres piensan, esto no solo afecta a la mujer de mayor edad. No obstante, existen tratamientos para ello.

Esta situación es especialmente frecuente en el postparto, cuando la musculatura del suelo pélvico está aún débil y reacciona de forma lenta. En un momento emocional complejo como es el postparto, la incontinencia de orina puede afectar en gran medida a la autoestima, pero se trata de un problema que se puede prevenir y tratar con fisioterapia del suelo pélvico.

En el Gabinete de Urología y Andrología ayudamos en la recuperación del postparto de una forma mas rápida e íntegramente. Al fortalecer el suelo pélvico mediante terapia manual, ejercicios y otras técnicas cuando sea necesario como la electroestimulación muscular o biofeedback.

Como consecuencia de la debilidad o desgarro de la musculatura del suelo pélvico tras el parto se pueden producir escapes de las heces o de gases al no poder controlar el esfínter que es la válvula que impide su salida.

Ante esta situación, la mujer debe acudir a nuestra unidad para  ser valorada por profesionales como fisioterapeutas expertos y ginecólogos que podrán aplicar nuestros tratamientos como los masajes perineales, dispositivos intracavitarios, electroestimulación, Biofeedback y poder así lograr acelerar la recuperación de las posibles consecuencias del parto.